La CGT redefine estrategia y varios gremios deben renovar mandato
Mientras la central obrera contiene al sector combativo, los nucleamientos de organziaciones deben elegir a sus nuevas conducciones. Lo que viene.
Buenos Aires, 11 enero (NA) -- El sindicalismo afrontará un año intenso en 2025 no solo por la necesidad de la CGT de redefinir su estrategia ante el gobierno de Javier Milei sino también porque varias organizaciones y nucleamientos gremiales deberán renovar sus mandatos, en momentos de fuertes enfrentamientos entre los sindicatos por la posición tomada ante el ajuste libertario.
La CGT inicia el año con una fractura expuesta después de la decisión del secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, de abandonar el triunvirato de la central disconforme con la pasividad de la mesa chica, que evitó tomar una nueva medida de fuerza contra el Gobierno después de los dos paros generales del 24 de enero y el 9 de mayo.
Pero Pablo Moyano fue reemplazado en la conducción cegetista por Octavio Arguello, otro dirigente camionero que reporta directamente a Hugo Moyano, el padre del clan y quien de este modo concretó, así, su regreso a la política sindical activa.
Los triunviros Héctor Daer y Carlos Acuña, que convivieron dificultosamente con Pablo Moyano, deberán maniobrar ahora entre las demandas del sector combativo de la central, que pide mayor confrontación, y los sindicatos nucleados entre los "Gordos" y los independientes, que apuestan por el diálogo y entre los que están UPCN y la UOCRA, conducidos por Andrés Rodríguez y Gerardo Martínez, respectivamente.
Estos últimos gremios enfrentan acusaciones de "colaboracionismo" con el Gobierno por parte de organizaciones externas como ATE, cuyo secretario general, Rodolfo Aguiar, acusó a Rodríguez de ser un "ministro sin cartera" de la administración mileísta.
Esta disputa repercute especialmente en el sector de los gremios de transporte, monopolizados por el moyanismo y desde donde se busca "reorganizar" al movimiento obrero para adquirir un perfil de mayor disputa con el gobierno de Milei, según pudo saber la Agencia Noticias Argentinas de fuentes sindicales.
En efecto, la renuncia del ferroviario Sergio Sasia a la conducción de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) en noviembre pasado fue la consecuencia de esa pulseada: sin apoyos, y después de haber dado el visto bueno a las privatizaciones del servicio de trenes, el dirigente debió dar un paso al costado en esa organización.
La CATT es uno de los nucleamientos que debe renovar mandato este año, y donde la jefatura es ocupada hoy, de manera interina, Juan Carlos Schmid, otro moyanista de fuste que en su momento supo tener proyección y que actualmente está semi retirado de la vida política.
De la misma manera, la filial cordobesa de la CATT y la rama de la Juventud de esa organización también deben elegir secretarios generales a lo largo de 2025.
Otro agrupamiento sindical que debe renovar autoridades este año es la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra), que nuclea a todos los gremios del sector y que actualmente también está a cargo de Schmid.
Unión Ferroviaria, el gremio que conduce Sasia, también tiene elecciones para secretario general a fines de año, aunque se descuenta que el actual mandamás del sindicato volverá a competir para renovar sus credenciales.
Ese punto, el de las reelecciones indefinidas en los gremios, era una de las espadas de la "democratización sindical" que impulsaron en el Congreso la UCR, el PRO y otros partidos, pero que sugestivamente quedó en stand by a la luz del diálogo del
sindicalismo con la Casa Rosada.